Húndete en mí, olvido.
Disuelve el recuerdo
el que no se va
el que no se quiere ir
el que no quiero que se vaya
Dame razones y frío
que no emociones, no sentidos
esos, esos encienden el alma
Déjame esta noche en el limbo
el cobarde e indeciso,
a la niebla del hastío
ignorante e inconsciente
perdido en ti, olvido
Lo ha decidido,
abandonándome perplejo.
En esta densa vastedad…
comprenderás entonces, por esta desesperanza,
que lo hago por necesidad…